El funcionario de prisiones Ortega Lara es víctima de un secuestro por parte de la banda terrorista ETA, a cambio de su liberación exigen el acercamiento de los presos de ETA a las cárceles del País Vasco.

El 1 de julio, tras la exitosa operación de rescate de la Guardia Civil que consiguió liberar al funcionario de prisiones Ortega Lara, un nuevo comando de ETA no tardaría en poner en jaque al gobierno de España con el secuestro de Miguel Ángel Blanco.

El joven concejal de Ermua perteneciente al Partido Popular Miguel Ángel Blanco es secuestrado el día 10 de julio de 1997 por un comando de ETA, que exige en 48 horas el acercamiento de los presos de ETA al País Vasco. Si el Gobierno no cumple sus exigencias Miguel Ángel Blanco será asesinado.

El 7 de junio de 1968 José Antonio Pardines un joven Guardia Civil de 25 años de edad, fue asesinado por Txabi Etxebarrieta e Iñaki Sarasketa siendo la primera víctima mortal de ETA.

Paralelamente, Carlos descubre investigando que en 1960 con los inicios de la banda terrorista, falleció en un atentado en San Sebastián, Begoña una niña de tan solo 22 meses de edad.

La extorsión a los empresarios vascos durante la década de 1980 y 1990, era la forma más habitual para que ETA pudiera financiarse y seguir sembrando el terror.

Algunos empresarios vascos plantaron cara a la banda terrorista ETA, pero la mayoría sufrieron en silencio por temor a ser secuestrados o asesinados.

Violencia, asesinatos, extorsión, secuestros, vivencias que junto al miedo que padecía cada pueblo del País Vasco por no comulgar con las ideologías de los terroristas. Entre 1980 y 2000 ocurrió el detonante para que más de 200.000 personas abandonaran el País Vasco, en busca de otras regiones más tranquilas y evitar el pago del “impuesto revolucionario” impuesto por ETA.

ETA intensifica su actividad terrorista en Barcelona desplazando un comando muy activo, ejecutando el atentado más sanguinario de la historia de la banda terrorista, en el que se cobró la vida de 21 personas y dejó a 45 heridos de diferentes consideraciones.

Después de seis décadas de extorsiones, secuestros y asesinatos, la banda terrorista se ve acorralada por las FCSE que asestan una y otra vez golpes a la cúpula de ETA, capturando a los principales dirigentes de la organización.

Álvaro al final de semestre mantiene un debate con sus alumnos en clase, estos le proponen ir a visitar a algunas víctimas y conocer sus historias contadas por ellos mismos. Álvaro, sabiendo la carga emocional que podría tener estos encuentros se resiste a dar ese paso, pero Laura termina convenciéndolo.

En el transcurso de las visitas a las víctimas, algunos alumnos se ven afectados emocionalmente, desembocando en la primera fractura del grupo.